“¿Quién convocó a tanto muchacho, de dónde salió tanto voluntario, cómo fue que la sangre sobró en los hospitales, quién organizó las brigadas que dirigieron el tránsito de vehículos y de peatones por toda la zona afectada? No hubo ninguna convocatoria, no se hizo ningún llamado y todos acudieron” escribía Emilio Viale para El Universal en 1985. Hoy, 32 años más tarde sus palabras vuelven a estar vigentes, bastaron unos minutos para dimensionar el estado de emergencia en el que las zonas damnificadas se encontraban y poco después las calles se inundaron de jóvenes dispuestos a brindar su ayuda. Ni el cansancio, ni el hambre, ni el riesgo ha podido frenar el ímpetu de ayuda.
Comments